El asesinado del Jueves Santo
Un hombre ha muerto apuñalado en una procesión de Semana Santa, en circunstancias extrañas: un joven cofrade llamado Grisóstomo. Todos los indicios apuntan a que ha sido asesinado por accidente, que el ataque iba dirigido, en realidad, a un usurero con una larga lista de enemigos. Así, la tesis principal que se baraja es que el asesino se confundió de persona, al llevar ambas el rostro cubierto por un capirote morado. Pero nada es lo que parece, y el sargento Carmelo Domínguez sabe esto mejor que nadie. En apariencia simple e inactivo, el sargento hechizado posee una de las miradas más astutas y analíticas de la provincia, una mirada que inquieta por tener un ojo de color azul y otro negro. Por ello sus superiores lo enviarán lejos de su demarcación, a Mataseca, para resolver este intrincado caso. El asesinado del Jueves Santo es una novela negra de corte clásico y, también, con elementos innovadores, como su personaje principal y su peculiar forma de actuar. En esta t